S, por supuesto, sigue sin dar señales de vida (gracias por
preguntar). Habría sido demasiado fácil, claro (no se en qué estaba yo
pensando), que alguien que me interesa de verdad hubiera quedado conmigo, nos
hubiéramos gustado, y hubiéramos compartido unos cuantos meses de estupidez y
felicidad. No, veo más viable lo del dragón (sigo esperando). Aunque, ¿quién
necesita más felicidad de la que te da marcarte una ruta de tres horas con
Linda en la bici de su ex (me duelen músculos que desconocía tener) bajo el sol
de San Isidro, o quedarte horas embobada viendo las volteretas que da mi recién
adoptada gatita Oshún mientras persigue una pelota de papel?
No. Esto de encontrar el amor es demasiado complicado, así
que creo que me voy a dedicar a follar hasta que los dioses de meetic decidan
apiadarse de mí y concederme un novio. Y si no lo hacen, pues eso que me llevo. Banana King style.
Precaución: Escúchala bajo tu propia responsabilidad. Una vez que se introduce en tu cebrero no podrás dejar de cantarla sin parar durante varios días. Mis sufridos alumnos dan fe de ello.
No hay comentarios:
Publicar un comentario